El Covid-19 y el Petróleo: Dos amenazas latentes en el territorio Amazónico Norperuano.

Propuestas de protocolos ambientales desde los territorios.

La paralización de las actividades económicas, en el marco del Estado de Emergencia, por la pandemia del Covid-19 ha impactado de forma particular al sector de hidrocarburos, sin significar una paralización total de las operaciones. En algunos lotes todavía se evacua personal, se mantienen operaciones al mínimo o incluso ocurren derrames de petróleo. Los conflictos socioambientales con comunidades tampoco han cesado, pues los lotes petroleros operan sobre territorios indígenas cuya población se ve forzada a convivir con pasivos ambientales.

01/05/2020 Derrame en la base de San Jacinto comunidad Doce de octubre.

A casi dos meses de iniciado el estado de emergencia, y frente a las presiones por reactivar la economía, el Poder Ejecutivo emitió a inicios de mayo el Decreto Supremo N°080-2020 donde establece medidas graduales para la apertura de diversos sectores. Por su importancia, el sector hidrocarburos está en la primera fase de la reactivación. Sin embargo, las medidas dadas por el Estado excluyen la opinión y participación de los pueblos indígenas, pese a que el conjunto de actividades tiene repercusión directa en sus territorios. Las medidas vulneran, una vez más, los derechos consignados en el Convenio 169 de la OIT y otros instrumentos legales, eludiendo consideraciones mínimas para la gestión de un conflicto histórico latente entre empresas petroleras y comunidades indígenas.

Por otro lado, las medidas protocolares del sector hidrocarburos presentan aspectos sin clarificar. ¿Respetarán las empresas, durante la reactivación económica, las decisiones de aislamiento y seguridad que han tomado las comunidades bloqueando puertos, ríos, entre otros? ¿Cómo se atenderá a los derrames de petróleo que hoy se convierte en espacios de potencial contagio debido a la frecuencia de trabajadores, mano de obra comunal y funcionarios del Estado? ¿Qué va a suceder con aquellos espacios de diálogo donde empresas petroleras y comunidades resolvían sus conflictos?

Propuestas de protocolos ambientales y diálogo con el Estado

Con el fin de construir un diálogo con el Estado e iniciar una dinámica adecuada de orientación en territorio indígena, las federaciones FEDIQUEP, FECONACOR, OPIKAFPE y ACODECOSPAT han elaborado protocolos para el caso de contingencias ambientales, que debe ser implementado por empresas y Estado al reinicio de las actividades . Las cuatro organizaciones remitieron su propuesta al Ministerio del Ambiente (MINAM) mediante carta el 7 de mayo. LINK A LA CARTA

Los documentos remitidos a la autoridad son “Protocolo mínimo para Covid-19 en el marco del monitoreo ambiental comunitario en pueblos indígenas”(link al documento), “Protocolo para prevenir contagios de coronavirus cuando hay derrames en la comunidad”(link al documento) y los lineamientos generales “Protocolo mínimo de prevención de contagio de Covid-19 para el marco de la atención de contingencias ambientales en territorio indígena para la autoridad del sistema nacional de fiscalización ambiental (link al documento)”.

En su propuesta las federaciones señalan a MINAM que “ninguna actividad externa como la de hidrocarburos y otras del Estado, pueden volver a operar en nuestros territorios si es que no se cuenta con altos estándares de seguridad”. Las organizaciones están preocupadas, manifiestan que la contaminación y el actual contexto del Covid-19 “diezmará a nuestros pueblos y si el estado no actúa de oficio, entonces cometerá genocidio contra nosotros”.

Las federaciones plantean que el Estado debe respetar las medidas que las comunidades asumen en el marco de la emergencia desde su derecho a la libre determinación. Además, plantean que siempre se debe llegar a acuerdos con sus organizaciones en el marco de los más altos estándares para la protección de la salud y el respeto de derechos.

Los protocolos abordan distintas situaciones. Por ejemplo, en caso la comunidad solicite el ingreso de la empresa, el Ejército o entidades de fiscalización, debe establecer una hoja de ruta. Este documento permite que las federaciones indígenas y comunidades, junto con sus monitores o monitoras vigilen el cumplimiento de buenos estándares de seguridad sanitaria durante la contingencia ambiental.

Diálogo con el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental

En el esfuerzo de las organizaciones indígenas de construir propuestas con el Estado, las cuatro federaciones indígenas integrantes de la plataforma PUINAMUDT también han hecho remitido al OEFA una propuesta de lineamientos de prevención sanitaria para actividades de evaluación y supervisión ambiental.

El documento busca asegurar la coordinación de la autoridad ambiental con las comunidades y federaciones indígenas afectadas por daños ambientales, recomienda la articulación de entidades públicas para que los ingresos a territorio indígena sean más eficientes y no exponga innecesariamente a las comunidades a posibles contagios. Con esos objetivos se plantean acciones concretas en cada etapa del monitoreo ambiental, desde la recepción de las denuncias respecto a las emergencias hasta el envío de los resultados públicos a comunidades y organizaciones indígenas. El documento plantea consideraciones tanto para el traslado como para la interacción durante la toma de muestras.

En su comunicación con el Estado, FEDIQUEP, FECONACOR, OPIKAFPE Y ACODECOSPAT dejan claro que, si bien sus comunidades y monitores y monitoras se preparan para adoptar mecanismos de vigilancia, autoprotección y cuidado ante el COVID 19, es el Estado el ente responsable de garantizar su salud y no exponerlos al virus. Por ello, exigen que se respeten estas propuestas y se cumpla con la obligación de garantizar y salvaguardar los derechos de los pueblos indígenas frente a las empresas.

5 ACCIONES PARA MONITOREO INDÍGENA DE ACTIVIDADES DE HIDROCARBUROS EN TIEMPOS DE COVID-19