Exclusión y extractivismo
Claves para entender la crisis ambiental y social en territorios indígenas amazónicos por la contaminación petrolera
#Exclusión y #Extractivismo
Más de 42 años de actividad petrolera en los Lotes 1AB y 8 de la región Loreto (desde 1971), en la selva peruana, han generado graves daños ambientales y sociales en las comunidades nativas de los ríos Pastaza, Tigre, Corrientes y Marañón. Por años los indígenas denuncian la grave problemática en sus territorios sin obtener respuestas y acciones claras del Estado. La ubicación geográfica remota y la exclusión histórica condenaron a las comunidades a la invisibilidad, al olvido y a ningún derecho.
Hablamos de una zona donde varias comunidades nativas no cuentan con títulos de propiedad, hay carencia de postas médicas o escuelas, incluso muchas personas no tienen DNI. La zona afectada alberga más de 100 comunidades y una población alrededor de las 20 mil personas.
Según cifras oficiales (Perupetro) en estos lotes petroleros la producción de crudo alcanza más de 21 mil barriles al día (abril 2014); esto es aprox. 2 millones de dólares diarios. Pero la zona está lejos de ser un ejemplo de desarrollo, salubridad, acceso a energía eléctrica u otros servicios.
La importante producción que se genera en estos lotes y las grandes ganancias puede ser la principal causa de los grandes beneficios y libertades de acción que tiene la empresa Pluspetrol, poseedora de las concesiones de ambos lotes. Sin embargo, esto no justifica su accionar desmedido, con mucha negligencia y faltas a la normativa ambiental. Los operadores anteriores en ambos lotes OXY (en Lote 1AB hasta 2000) y Petroperú (en Lote 8 hasta 1996), actuaron de igual o peor manera.