MINAM declara Emergencia Ambiental tarde y Plan de Acción insuficiente tras derrame de petróleo en el Pastaza
PUINAMUDT 28/11/2024.- El derrame de petróleo ocurrido el 3 de octubre en el río Pastaza en Loreto, ha dejado un desastre ambiental sin precedentes con un total de 40 barriles derramados, donde el crudo recorrió 75 km aguas abajo, y abarcó un área aproximada de 18,750 m2, según el informe del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
El pedido de declaratoria de Emergencia Ambiental al Ministerio del Ambiente (MINAM) por las autoridades de las comunidades afectadas fue presentado a los pocos días del desastre. Sin embargo, recién el 26 de noviembre, tras 54 días de espera, inacción y silencio del Estado, se oficializó mediante la Resolución Ministerial N.º 00414-2024-MINAM.
La tardanza de esta declaración, que se operativiza mediante un Plan de Acción Inmediato y a Corto Plazo, genera incertidumbre sobre su adecuada implementación y efectividad, considerando que el desastre ha deteriorado el ecosistema, afectado la salud pública y el acceso a recursos básicos como agua potable y alimento de miles de personas pertenecientes a 18 comunidades nativas afectadas del distrito de Andoas, por casi dos meses.
Por otra parte, si bien el Plan de Acción busca mitigar la contaminación y proteger la salud de la población en un plazo de 90 días, no se señalan actividades específicas para monitorear la exposición a hidrocarburos y metales pesados, como muestras y análisis de sangre. Las comunidades ya han sufrido un impacto irreparable y estarán vigilantes con el cumplimiento de lo prometido. La recuperación y remediación del río Pastaza no solo es vital para el ecosistema, sino también para todas las vidas que dependen de él.
Inacción estatal y falta de respuestas ante el desastre
El informe del OEFA detalla que el derrame ocurrió en el km 12 del Ramal Norte del Oleoducto Norperuano, bajo la administración de Petroperú, durante actividades de presurización y tratamiento químico de la tubería. Esto descarta la intervención de terceros, pero la empresa continúa sin hacerse cargo ni esclarecer las causas del incidente.
Las comunidades nativas afectadas por el derrame incluyen: Nuevo Porvenir, Nuevo Andoas, Los Jardines, Alianza Topal, Andoas Viejo, Capahuari Urko, Pañayacu, Nueva Vista, Huagramona, Naranjal Pastaza y Nueva Vida, las cuales dependen directamente del río Pastaza para subsistir.
Además, otras 12 comunidades del distrito de Pastaza que constataron la afectación de playas, pastizales y puertos, siguen sin recibir atención, a pesar de haberse pronunciado el pasado 20 de octubre. Exigen al Municipio que elabore el informe preliminar de daños, necesario para activar la atención a nivel nacional de instituciones como INDECI y MINSA, y los resultados de las muestras de agua tomadas por OEFA.
La falta de respuesta inmediata por parte de Petroperú y el Estado evidencia un patrón sistemático de inacción y maltrato frente a los desastres ambientales en territorios indígenas, lo que agrava la situación de vulnerabilidad de las comunidades afectadas y perpetúa la indiferencia ante sus derechos y necesidades.