El DAÑO NO SE OLVIDA

PUINAMUDT, 04/08/2015.- Lagunas muertas, territorios desolados, temor, animales contaminados, incertidumbre de futuro, pescados olor petróleo, impunidad, dolor, enfermedades extrañas, injusticia. Las consecuencias de 45 años de actividad petrolera en las cuencas del Pastaza, Corrientes, Tigre y Marañón, en la Amazonía peruana, han generado una situación social y ambiental que exige urgentes atenciones. Las  comunidades indígenas organizadas le han advertido al Estado que no permitirán que esa historia de daño se repita. El mal originado y los derechos indígenas vulnerados a lo largo de esta historia, no quedarán en el olvido.
La infografía realizada en colaboración con Programa Indígena de Equidad, Centro de Políticas Publicas y Derechos Humanos.
Puedes descargar una versión del documento aquí:
http://observatoriopetrolero.org/wp-content/uploads/2015/08/folletoweb_derechosvulnerados.jpg
Y con la foto de la madre Magdalena, de FEDIQUEP, aquí:
http://observatoriopetrolero.org/wp-content/uploads/2015/08/madremagdalenaF.jpg